-Fachada del Hotel Real de la Alhambra.
-Una zona del Restaurante Fortaleza Roja.
-Posando feliz en la habitación del hotel, junto a mi equipaje.
-Un rincón de la habitación.
-Desde la ventana del hotel, preparativos de una boda.
-Alrededores, de gran belleza, del Hotel Real de la Alhambra.
-Una zona del restaurante de carretera de Lorca, donde almorzamos en el viaje Alicante-Granada.
-Zona anexa al Restaurante.
El autobús en que viajamos desde Alicante hasta Granada.
Empiezo esta larga crónica de mi hazaña veletera, la mejor carrera de mi vida deportiva, que efectué a la edad de 67 años, con el relato del viaje y mi llegada al hotel. Salgo a las 8h de la mañana , desde la Estación de Autobuses de Alicante, en un bus de la empresa ALSA, muy cómodo. Voy con mi ángel, mi hermana Layla. Antes, el aseo y desayuno en casa y preparativos últimos del equipaje. No falta nada. En el ordenador, compruebo que en el diario "Información", se publica mi trabajo "Alicantinos en el Veleta". El viaje, comodísimo, de cinco horas, con llegada a Granada a las 13h. Una parada en un moderno restaurante de carretera, en Lorca, donde tomé dos bocatas, uno de queso y otro de jamón de York, un nestea y un delicioso cafetito. De postre un trozo de pastel de hojaldre con chocolate. Mi hermana, equivalente. Al llegar a la estación de autobuses granadina, buscamos la parada de taxis. Nos lleva el taxista correspondiente ( muy amable) y hablamos de política, de deportes, de la crisis,...Así, hasta llegar al Hotel Real de la Alhambra, donde ya nos tienen dispuesta la habitación. Tras descansar un poco, bajamos a comer. En el hall ya me encuentro a amigos, sobre todo a Ginés Soto Vilar, con su mujer y su encantador Ginesito. Quedamos para las 5 y media de la tarde en la Sala donde se entregarán los dorsales. Me comenta sobre Maje, pues hay dudas de si vendrá. Veremos. Le digo que seguro que irá a Granada, pues ella es todo voluntad. Esperemos. Vamos Layla y yo al Restaurante Fortaleza Roja, cercano al hotel y alllí nos trataron exquisitamente. Con el menú, buena calidad/precio, tendré que hacer una subida de película. Ensalada de la casa, plato combinado de chuletas, huevo frito y patatas, y café. De bebida, nestea. Bromeo con el Jefe de Recepción del hotel, que estaba en su media hora de descanso, tomando un refresco, y con el dueño y el camarero de Fortaleza:
-Entrada al restaurante de carretera, durante el viaje.
-Con este menú, ¡menuda subida voy a hacer!
-Que tenga mucha suerte.
-Gracias.
-Posando junto al autobús que nos llevó a Layla y a mi a la Granada embrujadora.
Tras un paseíto por los alrededores, y haciendo fotos, regreso a la habitación del hotel, a ver las noticias de la tele y a practicar mi "siesta regeneradora" A las 17h30m, bajaremos.
Saludos. Continuará. Soy muy feliz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario